Hoy, 19 de abril de 2015, celebramos -como cada año- el día mundial de la bicicleta.
Por Thiago Le Brun – Este domingo 19 de abril de 2015 celebramos el Día Mundial de la Bicicleta. En muchos de nuestros países, y ciudades en las que vivimos, se desarrollan una gran variedad de fiestas, eventos y celebraciones para conmemorar el día de la bicicleta.
En esta revista ya se ha explicado el motivo de la celebración del Día Mundial de la Bicicleta. Pero hoy queremos ir más allá de explicar el porqué, o de sencillamente brindar información sobre este día tan importante para la comunidad de ciclistas de todo el mundo. Hoy queremos proponerte hacer una reflexión sobre las bicicletas.
Utilizar la bicicleta ofrece -y nos regala gratuitamente- diversos y variados beneficios. Desde luego, mejoras relacionadas con el estado físico y la salud física. Pero no se limita únicamente a estos aspectos. Utilizar la bicicleta nos hace felices, nos educa e -incluso- nos ayuda y enseña a ser mejores ciudadanos.
Las ventajas del uso de la bicicleta como medio de transporte urbano, o el aumento de ciclistas aficionados que utilizan las bicicletas como ocio, entrenamiento y tiempo libre, hace que cada vez seamos más quienes salimos a la calle montados en las dos ruedas.
Y esta situación requiere que las sociedades en su conjunto satisfagan algunas necesidades básicas a los ciclistas. En especial, aquellas que permitan brindar un ambiente propicio al desarrollo de este tipo de actividades, en un marco de seguridad y confort.
De eso se trata el Día Mundial de la Bicicleta. Pues, sencillamente, de reclamar por los derechos de nosotros, los ciclistas. Pero, este Día de la Bicicleta no debería limitarse solamente a hacer un pedido de soluciones. Deberíamos comunicarle a la sociedad en su conjunto que nosotros también queremos hacer las cosas bien.
En este contexto, deberíamos demostrar que ya hemos madurado lo suficiente y que somos ciclistas responsables. Así, en el Día de la Bicicleta resultaría muy interesante que le gritemos al mundo que -por ejemplo- le decimos #NoALaBiciSinLuz. O, por qué no, que nuestra conducta en el tránsito es correcta y adecuada.
Pero, al mismo tiempo, deberíamos exigir -y explicar- que la regulación no debe transformarse en una barrera. Regular en materia de seguridad no debe ser una basta y larga lista de medidas de seguridad pasivas, que solo nos preparan para el impacto. Medidas que, al final del día, no solo no reducen las lesiones o siniestros de tránsito, sino que -y además- cierra la puerta para que más personas opten por utilizar las bicicletas a diario.
Es que, en definitiva, la mejor medida que promueve un tránsito más seguro para los ciclistas es -sin dudas- que más personas utilicen las bicicletas. A medida que aumenta el número de ciclistas en las calles, se reducen las tasas de sinestrialidad. Es una relación inversamente proporcional.
Pero, para lograrlo necesitamos que menos técnicos de escritorios trabajen en la materia, y que más personas con capacidad y ganas de mejorar comiencen a vincularse y comprometerse con la causa. Personas pragmáticas, idóneas y con la capacidad de analizar los buenos ejemplos a nivel mundial, y buscar -en consecuencia- lo mejor para cada una de nuestras sociedades.
Hoy es el día de la bicicleta. Y nosotros lo celebramos disfrutando de una jornada pedaleando por las calles de nuestra ciudad. Una jornada en la que demostraremos ser ciclistas responsables y exigiremos el respeto que merecemos y las condiciones que necesitamos para llegar seguros, sanos y salvos, a destino.
¿Este 19 de abril se celebra en tu ciudad el Día de la Bicicleta?
